La manicura y la pedicura semipermanentes llevan unos cuantos años entre nosotros y poco a poco se han posicionado como la opción favorita de muchos y muchas, llegando a ser uno de los servicios más solicitados en el salón.
Si aún no la has probado o tienes duda, en este post te explicamos cuáles son las ventajas de este tipo de manicura.
Manos y pies con efecto ¡wow!
Esmalte perfecto durante más tiempo
A diferencia de la manicura tradicional, este esmaltado tiene una duración de entre dos y tres semanas, dependiendo de la velocidad de crecimiento de las uñas. En el caso de la pedicura pueden durar incluso más, ya que el crecimiento es más lento.
Uñas más brillantes y duras
Con el esmaltado semipermanente, tus uñas permanecerán brillantes todo el tiempo y el color no perderá intensidad. Además, gracias a la técnica utilizada, otorgará a tus uñas de más consistencia, haciéndolas menos quebradizas y débiles.
Menos agresivo
Siempre que no se abuse de él, este esmaltado no estropeará nuestra uña. Es conveniente dejar descansar nuestras manos cada cierto tiempo para un buen cuidado.
Puedes pintar sobre el esmaltado de gel
Para ello sólo tendrás que pintar encima de tu uña ya esmaltada. Cuando quieras recuperar el color original, aplica un quitaesmalte sin acetona. Así conservarás tus uñas en perfecto estado y no te aburrirás del color que llevas.
¿Ya te has convencido? Recuerda que en Give Me Five trabajamos con esmaltes de primera calidad y contamos con una amplísima carta de colores.